Cuando Cuba comenzó a prepararse para la pandemia de COVID-19, el mundo reportaba que los menores apenas enfermaban y si lo hacían tendrían muy pocas complicaciones. A partir de ahí, existieron percepciones de riesgo variables y todavía arrastramos las consecuencias, aseguró Lissette del Rosario López González, Jefa del Grupo Nacional de Pediatría del Minsap, durante su intervención este viernes en la conferencia de prensa habitual de ese ministerio.