Teniendo en cuenta el comportamiento de la epidemia provocada por la COVID-19 en Cuba, y como parte de las acciones que se realizan para hacer frente a ella, este sábado el Grupo Temporal de Trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus aprobó una actualización del protocolo para el diagnóstico y el manejo clínico de pacientes confirmados, sospechosos y contactos de quienes han resultado positivos a la enfermedad.

Los números están diciendo que, en lo que a la epidemia de COVID-19 respecta, Cuba está todavía en una meseta alta. Es decir, que no despega hacia una situación de mejoramiento que vaya dejando atrás el actual pico pandémico. Así es, a pesar de todas las medidas que se han implementado; a pesar de una lucha cuya situación se pulsa a diario.

Al cierre de este viernes 16 de julio, Cuba reportó 6 062 nuevos casos de COVID-19 (para un total de 275 608 desde marzo de 2020), 52 fallecidos y 5 875 altas médicas, informó este sábado en su comparecencia televisiva el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap).