Este jueves, el primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, analizó la gestión operacional del sistema eléctrico del país, ante las últimas afectaciones que experimenta la isla por averías y defícit de reservas.
El jefe de Gobierno instó a directivos de la Unión Eléctrica a buscar alternativas y administrar las cargas disponibles para reducir las interrupciones en el servicio a la población.
Por su parte, el ministro de Energía y Minas, Liván Arronte, reiteró que 'pese a los obstáculos del bloqueo de Estados Unidos y la difícil situación económica que este impone, Cuba destinó presupuestos a proyectos de mejoramiento para la generación base y a los emplazamientos de generación distribuida'.
'El país trabaja intensamente todos los días para que esas afectaciones a nuestro pueblo no ocurran, en estos momentos paralizamos industrias y algunos sectores productivos para proteger el servicio al pueblo', subrayó.
El titular recordó que la generación base del sistema nacional proviene de termoeléctricas que tienen 35 años de explotación como promedio.
'En la última etapa, producto del recrudecimiento del bloqueo, hemos tenido una afectación en la disponibilidad de los recursos y no hemos podido hacer los mantenimientos de forma organizada', puntualizó en televisión nacional.
Recientemente el ministro explicó que el cerco estadounidense limita el acceso a créditos, financiamientos, piezas de repuesto y tecnologías, lo cual representa un obstáculo para los necesarios mantenimientos a las plantas generadoras.
Los cortes de electricidad son empleados por quienes alientan la desestabilización en la nación caribeña, como uno de los elementos para intentar provocar un estallido social y generar acciones como las ocurridas el pasado 11 de julio.
Sobre este particular, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, dijo que se trata de una actitud oportunista que obvia la dura persecución de las administraciones estadounidenses al suministro de combustibles a la isla.
Cubadebate.